Para escribirte estas líneas me he armado de coraje y aún así me cuesta mucho, principalmente por mi silencio hasta hoy respecto a la deuda que tengo contigo. Te ruego no pienses que he intentado no cumplir con ella querida hermana. A continuación te explico en detalle.
Al momento en que entramos al departamento los gastos que hicimos fueron más altos que los que inicialmente calculamos (el departamento no era habitable; por ello nos lo vendieron a un precio bajo). Tuvimos que darle prioridad al pago de albaniles y material (aun ahora estamos pagando los costos de éste).
Por otro lado las cosas en mi trabajo no andaron para nada bien. Ha habido una redefinicion de la participacion de los colaboradores y ya no me convenía financieramente. Ahora me he concentrado en mi ciudad y la transición es todavia dificil. Buscando no afectar negativamente la economia familiar, actualmente hago el portero nocturno en dos hoteles (de 12 pm a 8 am).
La situacion es dificil, pero Ornella y yo tenemos confianza en que las cosas han de cambiar en breve, sobre todo porque no estoy esperando cruzado de brazos. Por ello te pido que tengas un poco de paciencia en lo que se refiere al pago de tus € X000.00.
Hermana, la situación en tanto es aún dificil por causa de los pagos que tenemos que terminar (material de banos, puertas, pisos), y por ello te pregunto si me podrías hacer un préstamo de otros € X000.00. Discúlpame pero te lo tenía que preguntar.
En esta situación estamos ahora, y no me puedo acercar al banco pues con el préstamo que hicimos para la compra estamos más que bloqueados.
Kimiko, si te molestas por todo lo que te digo en esta carta, sabré aceptarlo y lo comprenderé, pero créeme que no ha sido intencional ni estoy queriendo aprovecharme de tu infinita paciencia, de la cual te estoy eternamente reconocido. Discúlpame nuevamente y te digo que seguramente no te imaginas cuánto siento que las cosas se hayan desarrollado de esta manera.
Te pido me contestes a la brevedad posible para poder evaluar qué
hacer. Gracias infinitas.
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Se burla de mí? El pendejo se disculpa muy bonito, pero sólo para sablearme mejor. No menciona para nada que le he escrito dos veces sin que se haya dignado responderme. Tampoco dice nada de cuándo piensa devolverme el dinero que le presté. Dijo que me lo pagaría en tres semanas, pero ya ha pasado un ano. Estoy furiosa con él! Quién necesita hermanos así?
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